domingo, 10 de noviembre de 2013

¿Es el perfeccionismo bueno? ¿Tiene ventajas? ¿Tiene desventajas?

¿Es el perfeccionismo bueno?  ¿Tiene ventajas? ¿Tiene desventajas?
Aparentemente el perfeccionismo nos ayuda a lograr más y mejores cosas. Pero independientemente de si nos damos cuenta o no, cuando somos perfeccionistas, pagamos un precio demasiado alto.
Vivimos tensos, nos angustiamos con facilidad, nos da miedo equivocarnos y cometer errores, no disfrutamos de nuestros logros, nos podemos sentir fracasados o inútiles con facilidad.
Con frecuencia negamos nuestro afán de perfección, bajo el lema de: "Me gusta hacer las cosas bien" o "Sólo dedicándole toda nuestra atención a lo que hacemos, podemos lograr y mantener el éxito".
Estas frases parecen lógicas y verdaderas, pero existe una gran diferencia entre querer hacer las cosas lo mejor posible y mejorarlas cuando se puede  sin demasiada angustia o estrés y tener que hacerlas perfectas (porque si no, significa que soy poco valioso, importante, inteligente, etc.).
El perfeccionismo nos hace sufrir y "perder"  en muchos aspectos de nuestra vida, puede ser el resultado de  una  baja autoestima, ya que, es un intento de demostrarnos y demostrarles a los demás, que somos capaces y dignos de ser valorados y apreciados. Pero al mismo tiempo es uno de los principales obstáculos para aumentar y fortalecer nuestra autoestima.
¿Te estás preguntando por qué? Porque trabajar para tener una autoestima elevada, implica hacer cosas que no siempre nos van a salir bien, significa reconocer y aceptar nuestros errores y lo más importante darnos permiso para cometerlos.

  
Ejercicio para vencer el perfeccionismo:
Lo debes realizar en un momento en el que te sientas tranquilo, y relajado.
Imagínate dentro de 1 año, sigues siendo perfeccionista, esforzándote excesivamente, sin disfrutar de los progresos, y dando el máximo siempre. Observa cómo ese esfuerzo excesivo afecta a tu estado de ánimo, y cómo esta exigencia afecta a tu salud.
Imagínate ahora que pasan 2 años más, que sigues estresado, cada vez más, y que, debido tu perfeccionismo y a esa exigencia tuya no lograste tantas cosas como habías pensado.
Esto te va a ayudar a convencerte de que ser perfeccionista no te va a llevar por buen camino y a estar cada vez más decidido a cambiar.
Ahora imagínate el escenario opuesto. Visualiza por un momento, que dejas de lado el perfeccionismo, que ya no te exiges tanto, que te permites disfrutar más de la vida, de tus seres queridos, de tu trabajo, de tus hobbies, de todo aquello que quieres hacer. Gracias a esto te sientes más relajado, aliviado y feliz, tienes mayor energía y la usas para disfrutar de la vida y conseguir los objetivos que quieres lograr, te das cuenta que, con una actitud menos exigente, puedes lograr mucho más, y sentirte mucho mejor.
Quédate un rato con la sensación de felicidad, e imagínate que pasan 2 años, empiezas a lograr cada vez más cosas en tu vida, pero con alegría y disfrutando de cada una de ellas y gracias a las cosas que logras te vas sintiendo cada vez mejor.

 Una vez que estés 100% convencido de cambiar, vas a permitirte ser menos que perfecto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario